Movidos por el instinto, los animales practican rituales ancestrales diversos, previos y posteriores a la satisfacción de sus necesidades. El hombre es el único con capacidad para crearlos y modificarlos con el objetivo de dar mayor efectividad a sus intenciones.
Aquella Mas.·. Operativa del medioevo usaba rituales: el saludo al Maestro de Obra, la oración matinal y la encomienda al Santo Patrón del Gremio, la forma de transmisión de claves secretas que acreditaban la pertenencia a la nómina, los actos de reconocimiento de capacitación laboral, la codificación de señales que delimitaban las diferentes etapas de la jornada, etc.. Todo ello formaba parte de la cotidianidad y, en alguna medida, fomentaba la predisposición y la renovación diaria del compromiso laboral. Toda Ceremonia de la Mas.·. actual también está sujeta a un Ritual cuyo cometido es la estructuración externa y formal del acto así como el de facilitar la introspección de los asistentes.
Una L.·. reunida bajo ritual es un perfecto foro de debate, realizado con el máximo respeto y tolerancia hacia las opiniones en él vertidas y sobre las cuales, la L.·. como institución, no corrige ni emite criterio alguno ni normas de interpretación ni conclusiones, simplemente mantiene a través de los Símbolos inherentes a la Mas.·. los valores de L.·. I.·. F.·., Respeto y Tolerancia.
El tema a debatir es elegido por los integrantes de la L.· .. Previamente y con suficiente antelación a cada reunión o Ten.·. habrá sido solicitado a un miembro de la L.· ., la confección de una exposición introductoria al tema que desee llevar a debate. Llegado el día y una vez expuesto el tema, los asistentes podrán solicitar la palabra -siempre se concede- con el fin de realizar nuevas aportaciones, adhesiones o expresar variantes y disconformidades sobre lo expuesto. Cuando ya no existen más solicitudes de intervención, el o la V.· .M.·. que preside la Ten.· ., cierra el tema… sin más. Las conclusiones son enteramente libres y personales.
Asistir a una Ten.·. Masónica equivale a participar en un acto constructivo donde el trabajo está sujeto a un Método Ritual, no existe un plano preestablecido dado que la pretensión no es la de alcanzar una forma fija y concluyente de pensamiento, sino de activarlo.
Existe gran número de Ritos en Mas.·., cada Federación o G.·.L.·. es depositaria, como mínimo, de uno de ellos; cada R.·.L.·. toma como propio sólo uno de los que su G.·.L.·. ofrece. La G.· .L.·.S.·.E.·. es depositaria de tres Ritos: Rito Escocés Antiguo y Aceptado, Rito Francés o Moderno y Rito Nacional Mexicano.
Para asistir a una Ten.·. Masónica es preciso ser Masón y como ya se ha apuntado, sólo se llega a serlo a través de la Iniciación.
Generalmente, la Iniciación en Mas.·. es la circunstancia que más curiosidades despierta a quienes se interesan por la Orden. Tampocola Orden , esté tocada por el “factor sorpresa”. Ello simplemente por la propia idea de “Iniciación” como “adquisición de los conocimientos iniciales que provocan una cierta transformación y que a la vez serán comienzo de un proceso de cambio”. La Iniciación en Mas.·. es simbólica, emotiva y sensorial, totalmente alejada de la magia, de la imposición y de lo agresivo.
El cine ha llevado a la pantalla, con mayor o menor precisión, Símbolos, Ritos, interioridades y detalles de la Mas.· ., en ocasiones como consecuencia de un alto grado de imaginación y en otras, en forma documentada y acorde a la realidad, sin olvidar aquellas en que aparecen como simple mención. Películas como “Horizontes perdidos” (1937), “El Ángel Exterminador” (1962), “El Gatopardo” (1963), “Z” (1969), “El hombre que pudo reinar” (1975), “Arde Missisippi” (1988), “El Padrino III” (1990), “Como agua para el chocolate” (1992), “Erin Brockovich” (2000), “Desde el Infierno” (2001), “Big Fish” (2003), “La Búsqueda ” (2004) y “El Código Da Vinci” (2006), son un reducido ejemplo de ello.
En 1989, TVE emitió la serie El Olivar de Atocha en la que se reproduce una Iniciación Masónica totalmente fiel a la realidad. También es digna de mención la película italiana Un borghese piccolo piccolo donde el actor Alberto Sordi interpreta, en forma magistral y bufa, el papel de postulante.
En la ficción, Pedro Picapiedra es miembro de la L.·. Los Búfalos Mojados y Homer Simpson es iniciado en la peculiar L.·. Stonecutters que, gracias al propio “H.·. Homer”, acaba disolviéndose. A pesar de ello, permítanos apreciado lector/a, preservar ese ya mencionado factor sorpresa.
Cuando los integrantes de una L.·. nos reunimos en Ten.·., lo hacemos en un espacio al que llamamos Templo. Los Templos Masónicos pueden ser lugares permanentemente habilitados u ocasionales; dentro de los primeros existen los que reflejan una gran riqueza arquitectónica y ornamental así como los que son modestos cubículos. En cuanto a los segundos, una L.·. puede reunirse donde desee. Se han realizado infinidad de TTen.·. en domicilios particulares, habitaciones de hotel, despachos, almacenes, garajes, azoteas e incluso en claros del boque y playas, la única condición que se exige al lugar donde se improvisa un Templo, es que garantice, en todo momento, la privacidad de la reunión.
Los obreros de la antigua Mas.·. Operativa se protegían con mandiles de diferentes tamaños y texturas dependiendo de su especialidad y de los riesgos laborales que esta comportaba. Estos mandiles llevaban distintivos que reflejaban el grado de especialización laboral y autoridad del portador en la Obra : El Maestro Arquitecto, los Supervisores, el Responsable de planos y normas, el Escribiente, el Administrador pecuniario, el Experto en materiales, el Administrador de espacios, el Físico (médico), los Picapedreros, Carpinteros, Vidrieros, Emplomadores, Escultores etc., llevaban mandiles diferenciados; debe tenerse en cuenta que la construcción de aquellas magnas obras medievales podía reunir a centenares de obreros y proporcionar trabajo a varias generaciones.
Apreciado/da lector/a, posiblemente habrá visto Vd. fotografías o dibujos de algún Masón actual ataviado con sus distintivos, de no ser así puede encontrarlo fácilmente en las imágenes que ofrece Internet.
Para los Masones, “ser Aprendiz” trasciende a la denominación del Primer Grado de la Orden , es el estado anímico que nos caracteriza siempre, a la vez que nuestro más apreciado atributo.
En Mas.·. impera la Igualdad , nadie puede saltar un Grado y ningún Masón es considerado superior otro, vista el Mandil que vista u ostente el cargo que ostente o posea los reconocimientos más encumbrados que pueda otorgar la sociedad profana (no Masónica).
Tanto para dirigir una L.·. (ser su V.·.M.·.) o una Ob.·. (ser su G.·.M.·.) como para ostentar cualquier cargo dentro de la Orden , es preciso poseer el Grado de Maestro Masón y haber manifestado la predisposición personal para obtener dicha responsabilidad. Todo cargo está limitado por un tiempo de legislatura y se obtiene mediante la votación de los HH.·. que se encuentran bajo su influencia. Nadie recibe remuneración material alguna por el cumplimiento de un cargo.
Cualquier persona que haya sido Iniciada por la Masonería puede llegar a obtener el Grado de Maestro Masón.
